EJERCICIOS
ESPIRITUALES
“Olvido de lo creado,
memoria del creador, atención a lo interior y estarse amando al amado” (San
Juan de la Cruz)
“Siendo los Ejercicios Espirituales todo lo mejor que yo en esta
vida puedo pensar, sentir y entender, así para el hombre poderse aprovechar a
sí mismo como para fructificar, ayuda y aprovechar a otros muchos…” (San
Ignacio de Loyola)
Los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola son un
instrumento de extraordinaria eficacia para unir el alma con Dios moviéndola,
no sólo a una profunda conversión interior, sino también situándola en
órbita de verdadera santidad y de entrega generosa a los demás.
La atención a Dios por parte del ejercitante durante los días que dura la experiencia
es fundamental. Se trata, nada menos, que de descubrir el rostro cercano de un
Dios Padre que nos ama con un amor tierno y apasionado, y cuya mejor
expresión y prueba es que nos envía a su Hijo amado para que, haciéndose uno
como nosotros, nos salve y nos de ejemplo de vida. Bajo la acción de la
gracia (¡del Espíritu Santo!) el ejercitante, profundamente sorprendido,
descubre hasta qué punto es ´afectado´ por este Amor increíble de Dios, de
manera que ya no puede dejarle tranquilo mientras viva.
En consecuencia, favorecer todo lo que ayude a esta ´atención
amorosa´ al Dios que se nos quiere manifestar en los Ejercicios, es algo muy
provechoso. La soledad y el silencio, así como la disposición interior
de generosa apertura y abandono, son del todo imprescindibles. Igualmente los son
los deseos (¡los grandes deseos!) de dejar a Dios actuar en nosotros como Él
quiera.
Que la Virgen María, a la que te debes encomendar con verdadero fervor desde el
inicio de los Ejercicios, te guíe y te ayude mucho en esta experiencia inolvidable.
P. Feliciano Rodríguez
Dice el Evangelio (Mc 3, 14) que
el Señor “los llamó para que estuvieran con Él y enviarlos a predicar”. Para
hablar al resto de Jesús, para impulsar tu vida y orientar tu vida matrimonial
y familiar, hay que estar a solas con Él, conociéndolo, escuchándolo, para más
amarle y seguirle. Si quiere aprender a dejar que Dios configure tu vida y la
haga más plena, esta experiencia te introducirá en una dinámica de contemplación
y de reflexión. Por eso, os proponemos unos Ejercicios
Espirituales.
Los Ejercicios son una experiencia
en la que, en silencio, se va meditando sobre nuestra propia vida a la luz del
Señor, nuestro pecado, las gracias que Él nos regala, … y a la vez contemplamos
su vida y lo que ha hecho por nosotros.
San
Ignacio de Loyola, uno de los santos más grandes que Dios nos ha dado, se dio
cuenta de que la verdadera felicidad está en el fiel seguimiento a Jesucristo,
y que esto no era posible sin una profunda relación con Él. Por ello, san
Ignacio crea los Ejercicios Espirituales, que a lo largo de la historia van a
producir incontables santos y conversiones.
Si estás
interesado realizar esta experiencia, ocasión única para conocer la
voluntad de Dios en nuestra vida y profundizar en la relación con Jesucristo,
de la mano de nuestra Madre, la Virgen María, envíanos un correo a cof@obispadocadizyceuta.es
y te avisaremos cuando estén organizados.